Título original: A 14-years Experience with Aortic Endograft Infection: Managemente and Results. Referencia: O.T.A. Lyons, et al. European Journal of Vascular and Endovascular Surgery 46;3:306-313
La infección de una endoprótesis es una complicación muy poco frecuente, indeseable y asociada con mala evolución, habiendo en la literatura pocos datos y con una estrategia de tratamiento poco clara.
Tradicionalmente la infección de la prótesis ha sido tratada removiendo la misma, debridando todo el tejido infectado y reconstruyendo la arteria seguido de terapia prolongada con antibióticos. Sin embargo una cirugía así, en pacientes que desde el inicio eran malos candidatos tiene una mortalidad de alrededor del 30% para las prótesis abdominales y una mortalidad aún mayor para torácicas.
Este trabajo es una serie de 22 pacientes consecutivos (13 abdominales y 9 torácicos) con infección documentada de la prótesis tratados entre 1998 y el 2012.
Del total, 7 pacientes (32%) recibieron endoprótesis para tratar complicaciones de una cirugía convencional previa. Durante el período de tiempo del estudio se trataron 7 fístulas aorto entéricas post cirugía convencional con endoprótesis de las cuales 6 (86%) terminaron infectadas. La infección se produjo a una media de 5 meses (0-51) del implante, siendo los factores de riesgo más importantes la sepsis post implante, la patología infecciosa primaria, las re intervenciones y las fístulas.
De los que presentaban dispositivos en la aorta abdominal, en 11 se realizó punción aspirativa, 3 fueron descartados de tratamiento invasivo debido a su condición clínica y fallecieron, en los 10 restantes la prótesis fue removida (3 de estos fallecieron dentro de los 30 días).
En el seguimiento a mediano plazo se observaron 3 muertes más, 2 de los cuales no estuvieron relacionados a la infección de la endoprótesis. En ninguno de los 9 pacientes con dispositivos en la aorta torácica se removió la prótesis. Se realizó punción espirativa en 3 e implante de una nueva endoprótesis debido a riesgo de sangrado o progresión del pseudo aneurisma en otros 3. No hubo muertes a 30 días pero en el seguimiento a 2 años, fallecieron 7 de los 9.
Conclusión
La remoción de una endoprótesis infectada abdominal tiene una alta mortalidad y morbilidad pero puede ser curativa. Por ende, la selección de pacientes candidatos a la remoción es el mayor desafío. El manejo conservador de una endoprótesis aórtica infectada se asocia con una sobrevida no mayor a 2 años.
Comentario
La infección de la prótesis es poco frecuente generando un verdadero desafío en su resolución. Existe poca información al respecto pero todas concuerdan en la mala evolución que presenta. Muchos pacientes no son candidatos a remoción, presentado además la cirugía de reconstrucción o el by-pass extra anatómico alta tasa de morbi-mortalidad. El drenaje espirativo disminuye o evita la sepsis pero tiene poca implicancia en la evolución.
Gentileza Dr Carlos Fava.
Cardiólogo Intervencionista.
Fundación Favaloro. Argentina.
Dr. Carlos Fava para SOLACI.ORG