La activación de la sala de cateterismo (con todo lo que esto implica) dentro de los 20 minutos se asoció con el objetivo de realizar la angioplastia primaria en menos de 2 horas en al menos el 75% de los pacientes.
Históricamente se medía el tiempo puerta balón, lo cual nos daba una idea muy somera de donde pueden estar los errores a corregir. Esto es especialmente cierto en aquellos pacientes que requieren traslado a otro centro de mayor complejidad con angioplastia primaria disponible.
Cuando estos tiempos se prolongan, la excusa de los cardiólogos intervencionistas es que los llamaron tarde, mientras que los cardiólogos clínicos indican que los primeros tardaron en llegar al hospital. Esta discusión es eterna y típica de la mañana después cuando se auditan los tiempos y los resultados.
Pueden existir múltiples factores confundidores en los retrasos, por lo que la novedad de este trabajo es haber medido el tiempo de activación, dándonos un número objetivo para mejorar la práctica.
Medir el tiempo de activación de la sala de cateterismos es algo nuevo en el proceso para mejorar la angioplastia primaria en pacientes con infarto con supradesnivel del segmento ST.
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El objetivo de este trabajo fue determinar si una activación más rápida podría impactar en una reperfusión más veloz, especialmente en los pacientes que requieren ser trasladados. Una sala lista para el procedimiento con un paciente todavía en la ambulancia no tiene mucho sentido.
Entre 2015 y 2017 se trataron 2063 pacientes con supradesnivel del segmento ST que requirieron traslado interhospitalario para la angioplastia primaria en 12 regiones geográficamente muy diferentes de los Estados Unidos.
Los pacientes fueron estratificados de acuerdo con el tiempo de activación de la sala de cateterismos (tiempo entre el arribo al primer centro y la activación de la sala en el segundo). El tiempo medio fue de 26 minutos, con más del 60% de la población por encima de los 20 minutos.
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La activación de la sala dentro de los 20 minutos se tradujo en un traslado más rápido (40 vs 68 minutos) y en una reperfusión más rápida (98 vs 135 minutos).
El objetivo de reperfusión dentro de los 120 minutos que sugieren las guías se pudo cumplir en el 80.1% de la población con activación precoz vs solo el 39% de aquellos en los que la activación demoró más de 20 minutos.
Los autores de este trabajo (que se publicó recientemente en Circ. Cardiovasc. Qual. Outcomes) nunca se imaginaron que llegaría el nuevo coronavirus. La pandemia ha interrumpido la auditoría de los tiempos de reperfusión e incluso las sociedades científicas han recomendado “tolerar demoras” para realizar una correcta evaluación epidemiológica o incluso indicar trombolíticos (sugerencias sin precedentes en una época sin precedentes).
Conclusión
Medir el tiempo de activación de la sala de cateterismo es una herramienta muy útil para mejorar significativamente el tiempo de reperfusión.
Título original: Catheterization Laboratory Activation Time in Patients Transferred With ST-Segment– Elevation Myocardial Infarction. Insights From the Mission: Lifeline STEMI Accelerator-2 Project.
Referencia: Michel Zeitouni et al. Circ Cardiovasc Qual Outcomes. 2020;13:e006204. DOI: 10.1161/CIRCOUTCOMES.119.006204.
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