Título original: Transcatheter aortic valve replacement versus surgical valve replacement in intermediate-risk patients: a propensity score analysis. Referencia: Vinod H Thourani et al. Lancet Published Online April 3, 2016.
Gentileza del Dr Carlos Fava.
El reemplazo valvular aórtico por catéter (TAVI) ha demostrado ampliamente su beneficios en pacientes de alto riesgo o inoperables pero actualmente existe poca evidencia en los de riesgo intermedio y bajo.
Se comparó la población del PARTNER 2 que recibió la válvula SAPIENS 3 y la cohorte que recibió cirugía del PARTNER 2A. El Comité de eventos Clínicos y el Core Lab Ecográfico fue el mismo para ambos estudios.
El “Heart Team” considero riesgo intermedio a un STS <4. Se excluyeron a los que presentaban aorta bicúspide, FEY <20% e insuficiencia renal severa. La tomografía multicorte fue mandatoria.
El punto final primario fue un combinado de muerte por cualquier causa, stroke e incidencia de regurgitación aórtica moderada a severa.
Se incluyeron 1077 pacientes que recibieron TAVI y 944 que recibieron cirugía y se utilizó propensity score para equiparar la muestra.
El TAVI resultó superior a la cirugía en el punto final primario al año (weight proportion difference de -9.2%; p<0.0001), en el individual de muerte (-5.2%; p=0.0003) y stroke (-3.5%; p=0.0038). La cirugía fue superior al TAVI en la presencia de regurgitación moderada a severa (1.2%; p=0.149).
La presencia de regurgitación aórtica moderada a severa se asoció a mayor mortalidad (13.3% vs 4.5% p<0.01).
La internación hospitalaria fue mayor en los que recibieron cirugía.
No hubo diferencia en la necesidad de marcapaso definitivo al año (12.4% vs. 9.4%), endocarditis o re intervención.
Conclusión
El reemplazo valvular aórtico trans catéter con la última generación de la válvula balón expandible SAPIENS 3 en pacientes con estenosis aórtica severa y riesgo quirúrgico intermedio está asociado con baja mortalidad, accidente cerebro vascular y regurgitación aórtica a un año. El análisis del Propensity score indica una superioridad del TAVI comparado con cirugía, sugiriendo que podría ser el tratamiento de preferencia en pacientes con riesgo intermedio.
Comentario editorial
Con el desarrollo de nuevas válvulas más la experiencia de los operadores y del los hospitales se permite obtener mejores resultados y comenzar a avanzar en paciente de menos riesgo.
Es necesario demostrar que la durabilidad de las válvulas a largo plazo, debido a que se están implantando en pacientes con sobrevida mucho más larga que en el grupo de alto riesgo e inoperables.
Gentileza del Dr Carlos Fava.
Cardiólogo Intervencionista
Fundación Favaloro – Buenos Aires