Gentileza del Dr. Carlos Fava.
La ruptura del anillo aórtico es un evento catastrófico que se presenta aproximadamente en el 0.9% de los casos, pero existe otra entidad que es la ruptura del anillo contenida. Ésta se encuentra relacionada con el oversizing del dispositivo y con la calcificación del anillo y es diagnosticada mediante TAC con una frecuencia de hasta el 5%.
Se realizó un análisis de 1602 pacientes del registro ENCORE. De ellos, 21 presentaron ruptura contenida del anillo (1.3%).
La edad media fue de 81.9 años, 18 fueron mujeres y la mayoría recibió válvulas balón expandibles.
En 17 casos la ruptura contenida del anillo se diagnosticó mediante una angioTAC de control, en 2 mediante un eco-transesofágico y en las 2 restantes por angioTAC luego del TAVI por sospecha clínica.
El seguimiento fue a 2.3 años. Ningún paciente presentó síntomas ni requirió re-intervenciones, y 9 fallecieron de causa no cardíaca.
Lea también: Aceite de oliva y riesgo cardiovascular ¿A mayor consumo menos enfermedad?
En las angioTAC de seguimiento uno presentó regresión, 7 permanecieron estables y 3 presentaron remisión.
Conclusión
Los resultados de este registro multicéntrico internacional demuestran que la ruptura contenida del anillo tuvo una evolución favorable soportando la estrategia de “mirar y esperar” en estos pacientes.
Gentileza del Dr. Carlos Fava.
Título Original: Long-term follow-up of patients with contained annulus ruptures after TAVI: the EuropeaN COntained RupturE (ENCORE) Registry.
Referencia: Philipp Breitbart,et al. EuroIntervention 2020;16:83-8.
Suscríbase a nuestro newsletter semanal
Reciba resúmenes con los últimos artículos científicos