Casi el 80% de los pacientes randomizados en este trabajo reportaron angina en CF II-III y casi todos (97%) tenían más de un test no invasivo positivo para isquemia que coincidía en territorio con el único vaso enfermo que tenían en todas sus coronarias. Más allá del FFR o el iFR, el estudio randomizó estos pacientes a angioplastia vs procedimiento simulado (grupo placebo) y podríamos haber esperado que los que recibieron angioplastia resolverían sus síntomas y los que recibieron placebo continuarían con la misma clase funcional de angina. Hay que recordar que todos se encontraban sintomáticos y que tenían un único vaso enfermo con isquemia demostrada por más de un estudio funcional.
Esto que “esperábamos” resultó bastante diferente ya que casi la mitad de los que recibieron angioplastia continuaron con angina, y lo que es más interesante aún, el 31.5% de los que recibieron placebo (el procedimiento simulado) reportaron encontrarse completamente libres de síntomas. Esta diferencia es significativa, por lo que se puede concluir que la angioplastia efectivamente mejora los síntomas. Sin embargo, hay cosas que todavía no terminamos de entender.
Antes de la randomización todos los pacientes fueron evaluados con iFR y FFR, siendo los operados ciegos al resultado. El FFR medio resultó de 0.69±0.16 y el iFR medio de 0.76±0.22 (no hay dudas de que todos estaban isquémicos) entre los 196 pacientes del estudio de los cuales 103 recibieron angioplastia y 93 placebo.
Lea también: La recanalización de las CTO mejora la calidad de vida.
La angioplastia mejoró claramente el resultado del ecocardiograma con stress (p<0.0001) y este efecto fue progresivamente más evidente a medida que el FFR y el iFR disminuían (p para la interacción <0.00001). Esta es la parte esperable del resultado del estudio donde todo parece lógico.
Sin embargo, la angioplastia no mejoró significativamente el score de frecuencia de angina en comparación con el placebo y este efecto no tuvo una interacción evidente que se pudiera detectar con los resultados del FFR (p=0.849) o del iFR (p=0.783).
Lea también: Compresión manual o mecánica luego de un cateterismo por acceso radial.
Más allá de lo anterior y como ya se mencionó al principio, la angioplastia se asoció con una mayor libertad de angina (49.5% versus 31.5%; OR 2.47; IC 95% 1.30 a 4.72; p=0.006), aunque ni el FFR ni el iFR pudieron predecir este efecto.
Sin dudas este es uno de los estudios más interesantes que se hayan publicado sobre cardiopatía isquémica y a pesar de sus escasos 196 pacientes va a dar mucho que hablar.
Título original: Fractional Flow Reserve and Instantaneous Wave-Free Ratio as Predictors of the Placebo-Controlled Response to Percutaneous Coronary Intervention in Stable Single-Vessel Coronary Artery Disease. Physiology-Stratified Analysis of ORBITA.
Referencia: Al-Lamee R et al. Circulation. 2018 May 22. Epub ahead of print.
Reciba resúmenes con los últimos artículos científicosSuscríbase a nuestro newsletter semanal
Su opinión nos interesa. Puede dejar su comentario, reflexión, pregunta o lo que desee aquí abajo. Será más que bienvenido.