TAVI y marcapasos, nuevas estrategias

Gentileza del Dr. Carlos Fava.

El TAVI ha demostrado su beneficio y está avanzando cada vez más a poblaciones de menos riesgo, pero en la actualidad la limitación (quizás la más importante en válvulas aórticas tricúspides) es la necesidad de marcapaso definitivo (MCPD), especialmente en válvulas autoexpandibles, como fue demostrado en los recientes estudios de bajo riesgo.

¿Fin de la discusión sobre el impacto del marcapaso post TAVI?

Se analizaron 248 pacientes con estenosis aórtica severa que recibieron válvulas autoexpandibles EVOLUTE, EVOLUTE PRO y EVOLUTE XL 34. Se analizó la profundidad de implante a nivel del seno no coronariano (SNC).

El procedimiento fue realizado por acceso femoral con sedación consciente y anestesia local.

La edad fue de 83 años, más de la mitad hombres, 5.7% bloqueo completo de rama izquierda, 14.9% bloqueo completo de rama derecha (BCRD). El STS score de mortalidad fue del 6%.


Lea también: Sesión Latinoamericana en TCT 2019.


El stroke post-procedimiento fue de 2.4% y la mortalidad hospitalaria y a 30 días fue de 0.4% y 1.2% respectivamente.

La necesidad de MCPD fue del 9.7%, la mayoría dentro de las primeras 72 horas (22 de 24 pacientes). No hubo diferencias clínicas entre los que requirieron MCPD y los que no lo necesitaron.

Los predictores de MCPD fueron: BCRD; anillo aórtico de gran tamaño y de la raíz aórtica; y la longitud del septum membranoso: cuando fue <5 mm la necesidad de MCPD fue del 95% (23-24 pacientes) pero cuando fue >5 mm, la misma fue de 1.4%.

En el análisis multivariado la profundidad del implante >septum membranoso (odds ratio: 8.04; 95% confidence interval: 2.58 to 25.04; p < 0.001) y la Evolut 34 XL (odds ratio: 4.96; 95% confidence interval: 1.68 to 14.63; p= 0.004) fueron predictores independientes de necesidad de MCPD.


Lea también: ¿Deben involucrarse los cardiólogos intervencionistas en el stroke agudo?


El approach con la estrategia de MIDAS (mínima profundidad con respecto al septum membranoso), que fue realizado en 100 pacientes con el objetivo de posicionar la válvula con una profundidad menor a la del septum membranoso, redujo la necesidad de MCPD (9% vs. 3% p=0.003) y la tasa de nuevo BCRI (25.8% vs. 9% p>0.001).

Conclusion

La utilización de la estrategia MIDAS para el implante en las válvulas autoexpandibles logró una baja y predecible tasa de necesidad de MCPD que fue significativamente inferior a la reportada previamente.

Gentileza del Dr. Carlos Fava.

Título Original: Minimizing Permanent Pacemaker Following Repositionable Self-Expanding Transcatheter Aortic Valve Replacement.

Referencia: Hasan Jilaihawi, et al. Am Coll Cardiol Intv 2019;12:1796–807.


Suscríbase a nuestro newsletter semanal

Reciba resúmenes con los últimos artículos científicos

*

Top