Título original: Direct drug-eluting Stenting to reduce stent reestenosis (STRESSED). Referencia: Wouter S. Remkes et al. J Am Coll Cardiol Intv, 2014;7: 751-8.
El implante de stent de manera directa, sin predilatación, ha sido utilizado de manera segura y efectiva, reduciendo el tiempo de procedimiento, radiación, uso de contraste así como los costos de los materiales; sin embargo, los estudios fueron realizados con stents convencionales.
El presente estudio buscó evaluar si la estrategia de stent medicado (DES) directo está asociada con menor reestenosis que el DES con pre dilatación.
Se eligieron 600 pacientes, menores de 85 años con angina estable o inestable reciente, con lesiones ACC/AHA tipo A, B1 y B2, no calcificadas, con estenosis mayor de 50% y menor del 100%. No se incluyeron bifurcaciones, lesiones ostiales, tronco de coronaria izquierda ni pacientes con disfunción ventricular ni renal severa, los stents utilizados fueron DES de segunda generación liberadores de Zotarolimus o Everolimus.
Los pacientes fueron randomizados en 3 grupos: DES directo DS (n=198), DES con predilatación CS (n=201) y DES provisional PS (n=201). El objetivo primario fue el diámetro mínimo endoluminal medido por angiografía cuantitativa a los 9 meses y el secundario fue un combinado de muerte, infarto y revascularización durante la hospitalización, a los 9 meses y a los 2 años.
El éxito del procedimiento fue de 99% en los 3 grupos. El diámetro mínimo endoluminal a los 9 meses fue de 2.12mm (DS), 2.17mm (CS) y 1.99mm (PS); la reestenosis fue de 3.4% (DS), 6.7% (CS) y 11.5% (PS). El MACE a los 9 meses y 2 años ocurrió en 6.8% y 11.5% (DS), 4.6% y 10.3% (CS) y 7.6% y 13.8% (PS)
Conclusión
El implante directo de stent medicado no redujo la reestenosis con respecto al implantado con predilatación. El stent provisional se asoció con mayor reestenosis. El MACE durante el seguimiento no mostró diferencias estadísticamente significativas entre los 3 grupos.
Comentario editorial
Este estudio incluyó al grupo de stent provisional debido a que es la continuación del DIRECT-2, el cual tuvo el mismo diseño con stents convencionales, el resultado en este grupo era esperable en cuanto a la reestenosis, puesto que el 23% de sus pacientes no recibieron stent. Se esperaba una reducción de la reestenosis en el grupo con stent directo debido a las ventajas de la técnica y a las características no complejas de las lesiones. Será necesario comparar ambas técnicas con números más grandes.
Gentileza del Dr. Alfonso Francisco Balaguer Quiroga
Cardiólogo Intervencionista.
Clínica Internacional. Lima, Perú.
Alfonso Francisco Balaguer Quiroga