La enfermedad coronaria severa es una causa frecuente de deterioro de la función ventricular izquierda. En estos casos, la cirugía de revascularización miocárdica (CRM) suele ser el tratamiento de elección, especialmente cuando la fracción de eyección es ≤35%.
Sin embargo, en numerosas ocasiones la cirugía no es una opción debido a las múltiples comorbilidades de los pacientes, haciendo que la angioplastia transluminal coronaria (ATC) se convierta en una alternativa válida. No obstante, en este escenario, las oclusiones totales crónicas (CTO) son frecuentes, lo que incrementa el riesgo de complicaciones y de isquemia durante el procedimiento, ya sea por vía anterógrada o retrógrada, comprometiendo incluso los vasos donantes. En estos casos, el uso de dispositivos de asistencia ventricular puede ser una estrategia adecuada, aunque la evidencia en la literatura sigue siendo controvertida.
Se realizó un análisis de 27 pacientes con enfermedad coronaria severa, al menos una CTO, y deterioro grave de la función ventricular.
El punto final primario fue el MACE, compuesto por muerte cardiovascular, infarto y revascularización del vaso tratado (TLR) a 90 días.
La edad media fue de 63 años; 25 pacientes fueron hombres. El EuroSCORE promedio fue de 5.07. En cuanto a comorbilidades, 11 pacientes presentaban diabetes, 19 hipertensión arterial, 19 insuficiencia cardíaca, 7 habían recibido una ATC previa, 4 una CRM, 2 tenían antecedentes de stroke, 3 fibrilación auricular, 9 enfermedad vascular periférica, y 7 deterioro de la función renal. La fracción de eyección media fue del 23 ± 7%.
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El puntaje SYNTAX fue de 37. En total, se trataron 38 CTO; 14 pacientes presentaban enfermedad de tres vasos y 11 de dos vasos. La CTO más frecuente fue de la coronaria derecha, seguida de la descendente anterior (DA) y, en menor proporción, de la circunfleja (CX). El puntaje J-CTO promedio fue de 2, con un riesgo de MACE estimado del 2.5%.
El acceso para el dispositivo Impella fue femoral en 23 pacientes, axilar en 3 y carotídeo en 1. La revascularización completa se logró en 15 pacientes (56%).
A nivel hospitalario un pte falleció por derrame pericárdico, otro presentó infarto, y 3 complicaciones vasculares.
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A nivel hospitalario, un paciente falleció por derrame pericárdico, otro presentó un infarto, y hubo 3 complicaciones vasculares. A los 90 días, el punto final primario ocurrió en 3 pacientes: 2 fallecimientos y 1 TLR. Sin embargo, 22 pacientes experimentaron una mejoría significativa de la angina y la disnea. Además, se observó un aumento significativo de la fracción de eyección hasta un 33%, acompañado de una reducción relevante de los volúmenes sistólicos y diastólicos.
Conclusión
En pacientes de alto riesgo con deterioro severo de la función ventricular y anatomía coronaria compleja, incluidas las CTO, la ATC con soporte circulatorio mecánico con Impella se asoció con una evolución favorable en términos de seguridad y eficacia a corto plazo.
Título Original: Mechanical Circulatory Support With Impella in High‐Risk Patients With Chronic Total Occlusion and Complex Multivessel Disease.
Referencia: Ignacio Gallo, et al. Catheterization and Cardiovascular Interventions, 2025; 105:883–890 883 of 980 https://doi.org/10.1002/ccd.3139.
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