Los pacientes con enfermedad coronaria (EC) o síndromes coronarios crónicos (SCC) presentan un desafío en cuanto a la selección del tratamiento más adecuado, siendo fundamental una correcta estratificación para una eventual angioplastia coronaria (PCI).
La evidencia aportada por el estudio ORBITA-2 ha mostrado que los parámetros fisiológicos invasivos, como el FFR o el iFR, poseen cierta utilidad para predecir el alivio sintomático tras una PCI. Sin embargo, otras técnicas no invasivas, como la ecocardiografía de estrés con dobutamina (ESD), no contaban hasta ahora con una validación sólida. Actualmente, las guías clínicas recomiendan el uso de métodos diagnósticos no invasivos en pacientes con una probabilidad pretest intermedia de EC.
El ORBITA-2 fue un estudio aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo, realizado en 14 centros del Reino Unido, diseñado para evaluar el efecto sintomático de la PCI en pacientes con angina estable y con mínima o nula terapia antianginosa. En este subanálisis preespecificado, se exploró el valor predictivo de la isquemia inducida por ESD sobre la respuesta sintomática posterior a la PCI.
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Se incluyeron 262 pacientes con angina estable, enfermedad de uno o más vasos y evidencia de isquemia. Todos suspendieron la medicación antianginosa 48 horas antes del procedimiento y fueron evaluados mediante ESD, prueba de esfuerzo, cuestionarios de síntomas (CCS, SAQ, EQ-5D-5L) y la aplicación móvil ORBITA. La edad media fue de 65,5 años; el 79,4 % eran hombres, el 80,9 % presentaba una estenosis severa en un territorio coronario y el 16,8 % en dos territorios.
La puntuación de ESD se calculó utilizando un modelo estandarizado de 17 segmentos miocárdicos, ponderando el grado de disfunción segmentaria. El 94,3 % de los pacientes alcanzó al menos el 85 % de la frecuencia cardíaca objetivo.
Los resultados de este subanálisis fueron concluyentes: a mayor puntuación en el eco-estrés con dobutamina, mayor fue la mejoría sintomática tras la PCI en comparación con placebo. Esto se evidenció tanto en la reducción del score de angina (OR: 1,69; IC95%: 1,40–2,03) como en la disminución de los episodios anginosos diarios (OR: 1,36; IC95%: 1,24–1,49) y en los puntajes de calidad de vida (QoL) del SAQ (frecuencia de angina: diferencia de 8,22 puntos; calidad de vida: 8,95 puntos). Esta relación se mantuvo incluso en pacientes con sintomatología atípica.
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A diferencia de otras herramientas como el FFR o el iFR, cuya utilidad predictiva se limita a ciertos contextos, la ESD demostró una capacidad robusta para anticipar el beneficio clínico, independientemente del tipo de síntomas.
Conclusiones
Este subanálisis del ORBITA-2 refuerza el valor clínico de la ecocardiografía de estrés con dobutamina como herramienta no invasiva en la selección de pacientes sintomáticos que podrían beneficiarse de una PCI. Los datos presentados respaldan su integración dentro de una estrategia de toma de decisiones clínicas que priorice la evaluación funcional previa a la revascularización.
Título original: Ischemia on Dobutamine Stress Echocardiography Predicts Efficacy of PCI: Results From the ORBITA-2 Trial.
Referencia: Ahmed-Jushuf F, Foley MJ, Rajkumar CA, Chotai S, Simader FA, Wang D, Macierzanka K, Sehmi J, Kanaganayagam G, Lloyd G, Keenan N, Bual N, Davies JR, Keeble TR, O’Kane PD, Haworth P, Routledge H, Kotecha T, Williams R, Din J, Nijjer SS, Curzen N, Sinha M, Ruparelia N, Gamma R, Spratt JC, Cole GD, Harrell FE Jr, Howard JP, Francis DP, Shun-Shin MJ, Al-Lamee RK; ORBITA-2 Investigators. Ischemia on Dobutamine Stress Echocardiography Predicts Efficacy of PCI: Results From the ORBITA-2 Trial. J Am Coll Cardiol. 2025 May 13;85(18):1740-1753. doi: 10.1016/j.jacc.2025.02.034. PMID: 40335250.
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