Mejoría de la fracción de eyección post TAVI, solo si no se presentaron trastornos de conducción

Título original: Impact of a New Conduction Defect Alter Transcatheter Aortic Valve Implantation on Left Ventricular Function Referencia: Rainer Hoffmann, et al. J Am Coll Cardiol Intv 2012;5:1257– 63.

El desarrollo del implante valvular percutáneo aórtico (TAVI) en pacientes (ptes) de alto riego puede producir alteraciones en el sistema de conducción y requerimiento de marcapaso definitivo (MCPD) en alrededor de la tercera parte de los ptes. 

El objetivo de este estudio fue evaluar el impacto que presentan los trastornos nuevos de conducción luego del TAVI sobre la función ventricular a un año de seguimiento. Se analizaron en forma prospectiva 90 ptes entre Enero del 2009 y Julio del 2010. Las válvulas implantadas fueron Corevalve en 52 ptes y Edwards SAPIENS en 38 ptes.

Los volúmenes de ventrículo izquierdo así como la fracción de eyección (FEY) fueron similares en ambos grupos previo al procedimiento. Se presentaron trastornos nuevos de conducción en 39 ptes de los cuales en 31 fue bloqueo completo de rama izquierda (12 de estos finalmente requirieron MCPD) y en 8 ptes bloqueo A-V completo con el consiguiente MCPD. Los trastornos de conducción se presentaron en 32 ptes a los que se les implantó Core Valve y en 7 Edwards SAPIENS.

Los ptes que no presentaron trastornos de conducción mostraron mejoría significativa en la FEY con respecto al basal (5.8 ± 7.9%;p= 0.001) y del volumen de fin de sístole. En el grupo de ptes que presentaron trastornos de conducción la FEY prácticamente no se modifico a 12 meses. No hubo diferencia en la FEY con respecto a la válvula implantada. La presencia de nuevos trastornos de conducción y la FEY basal fueron predictores de reducción de la FEY a 12 meses.

Conclusión 

La fracción de eyección luego del TAVI mejora en aquellos ptes que no presentan trastornos nuevos de conducción, esto no ocurre en los que si los presentan.

Comentario editorial

Si bien la presencia de trastornos de conducción y la necesidad de MCPD luego del TAVI es un evento frecuente, esto no trae aparejado mayor mortalidad a pesar de que no mejore la función ventricular. Si bien la cirugía ha demostrado tener menos trastornos de conducción, se ha realizado en ptes menos complejos que los tratados por esta técnica, siendo quizás este, el factor que contribuya a la aparición de los mismos. Con respecto a las válvulas, se van a requerir en el futuro que sen mejoradas intentando disminuir esta complicación. 

Gentileza Dr Carlos Fava.
Cardiólogo Intervencionista.
Fundación Favaloro. Argentina.

Dr. Carlos Fava para SOLACI.ORG

*

Top